viernes, 2 de octubre de 2009

ECLIPSE CON RIMBAUD


He pasado la mitad de mi vida en la oscuridad.
He descargado camiones de oscuridad.
He bebido toda la oscuridad.
He dormido con la oscuridad.
He amado la oscuridad y me he acostado con ella.
He tocado las piedras de la oscuridad hasta herirme las manos.
He repetido tu nombre en la oscuridad.

Los pescadores cantan en la niebla de la oscuridad.
Los jóvenes sin vida están despiertos en la oscuridad.
Los músicos y las rameras guardan su corazón en la oscuridad.

He soñado con la oscuridad la mitad de mi vida.
He hospedado mi juventud en el cáñamo de la oscuridad.
He desnudado a la oscuridad y gozado con ella.
He acariciado con dedos de pastor el sexo de la oscuridad.

La oscuridad es la oración de los acordeones nublados.
La oscuridad vive en las palabras que descifran la muerte.
La oscuridad habita los suburbios de la belleza.

Dad de ladrar al perro de la oscuridad.
Oíd la lepra sagrada de la oscuridad.

Juan Carlos Mestre

miércoles, 26 de agosto de 2009

Me cago en mis adolescentes

Para los lectores de El País y esa sección, tan bonita, revista de verano, seguramente habrán leído a Carlos Cay y su segunda entrega en el diario global de “Me cago en mis viejos”; cuya primera temporada, por así decirlo, ya tiene forma de libro por la editorial gachupa, Edhasa. La prosa escatológica y puñetera del autor, hasta ahora desconocido, ha sido inflada por el gran diario de “izquierda” español manteniendo el suspence en la identidad del que se nos presenta como un adolescente precoz y malhumorado. Por lo demás, a pesar de la crítica envidiosa y moralina que ha despertado este periodismo blogger de poca monta, a mí se me hace divertidísimo. Una fresca narrativa que me suena, con sospechosa similitud, a Ray Loriga en su novela Lo peor de todo, una buena lectura, sin duda. Aquí les dejo alguna crítica y reflexión entorno a éste, quiérase o no, enigmático (mal) emulador de Salinger.

Carlos Cay: el regreso del memo
ECL. Madrid. La noticia ha saltado hoy en todos los teletipos y ha causado alergia y vómitos en las personas: los directivos del diario El País han decidido -quizá tras una insolación o tal vez tras una fiesta con un exceso de sustancias psicotrópicas- darle una nueva oportunidad a esa babosa iletrada que se hace llamar Carlos Cay y a la que todo el mundo en la redacción del rotativo conoce como "El Desperdicio".
Efectivamente Carlos Cay, "El Desperdicio", amenaza otra vez con asolar cualquier rastro de inteligencia en su gonorreico reportaje estival titulado 'Me cago en mis viejos', que durante el verano pasado se constituyó como la bazofia más asquerosa y mugrienta del periodismo nacional. En pocas ocasiones una sección de un diario ha concitado tanta unanimidad: en el caso de Carlos Cay, sin embargo, todo el mundo coincidió en considerarlo un perfecto imbécil y un memo de primera división. Nuestro crítico de cabecera, Nelson el peruano, añade por su cuenta que no le extraña que Carlos Cay sea un pseudónimo: "Aunque definitivamente es un bobalán, seguro que su padre, en el improbable caso de que lo conozca, le habrá recomendado que no dé a conocer su verdadero nombre, para que la gente no se ría de él por la calle. A nadie le apetece tener cerca a una persona que escribe semejante basura".
El diario El País, para darle un poco de misterio al asunto, sigue abundando en intrigar al público y se pregunta "¿Quién será este [mierda de] Carlos Cay?". Lo cierto es que semejante pregunta no tiene la más mínima importancia: con toda seguridad será uno de los muchos "recomendaos" que pueblan las páginas cada vez más babosas del diario, destinadas a ser escupidera de verano con las memeces del tarado de Carlos Cay. Puede ser un presunto como Ray Loriga, el cerebro más torpe y más sucio del panorama literario español; puede ser el hombre SPG, Toni Martínez, un recomendado abonado al fracaso; puede ser Elvira Lindo, casada para ser algo en la vida; puede ser, en fin, cualquiera de los paniaguados pesebreros a los que da de comer últimamente el diario más endeudado de España. Pero, como dice nuestro crítico Nelson, "poco importa cuál sea el nombre del sujeto: es normal que la vergüenza le obligue a esconderse, como la vergüenza ajena nos obliga a nosotros a regüeldar cuando leemos sus memeces y sus infantilismos de tarado". En opinión de nuestro crítico, haber demostrado determinadas habilidades sexuales con los directivos del diario no debería ser una razón para darle trabajo a ese individuo.
Uno de los detalles más divertidos del anuncio que proclama el próximo y vomitivo regreso de El Memo es la sugerencia de que este pobre desgraciado tiene, en su escritura, alguna relación con Salinger y Bukowski. En la redacción de El Corresponsal Literario hubo verdaderos ataques de risa cuando se leyó en voz alta esta afirmación de frenopático. Es recomendable que los periodistas de El País comiencen a leer libros para mayores de ocho años y a estudiar un poco, o seguirán incurriendo en este tipo de majaderías impropias de un diario con su trayectoria.

Nota: El Corresponsal Literario comunica a sus lectores que nunca ha tenido ningún interés en el personaje citado arriba, cuya vida y miserias nos traen al fresco, y que este artículo ha sido pagado por el diario El País con el fin de seguir alimentando la polémica que, al parecer, suscita el susodicho individuo.

Publicado por El Corresponsal Literario
http://elcorresponsalliterario.blogspot.com/2009/07/carlos-cay-el-regreso-del-memo.html

Me cago en mis viejos”: ¿Quién está detrás de Carlos Cay?
Por César Calderón

No sé si a ustedes les ha pasado, pero una de las conversaciones más recurrentes que me estoy encontrando este verano es sobre el experimento que está realizando el diario “El País” con su serie de relatos titulada “Me cago en mis viejos”, firmada por un tal Carlos Cay. En la primera entrega , Carlos Cay se nos presentaba como un adolescente con padres progres (lectores de El País) que se iba a pasar en verano estudiando para su selectividad, al que el padre de un amigo, redactor de el diario de PRISA, le ha ofrecido escribir una serie de relatos sobre el tema que le diera la gana y de forma anónima. Con cuatro capítulos ya publicados, el interés por el autor se ha disparado, existiendo ya varias teorías sobre la autoría de este estupendo divertimento.Coincide casi todo el mundo en que no parecen textos realizados por un adolescente a pesar de los giros que utiliza y por lo que parece casi todo el mundo tiene una teoría sobre el autor. ¿Quien es en realidad Carlos Cay?. Fuentes generalmente bien informadas nos cuentan que quien está detrás de este nombre puede ser “alguien de la casa”, un redactor o colaborador de El País, habiendo incluso quien se arriesga a decir que pudiera ser el mismísimo Ray Loriga.
Otras voces apuntan hacia José Angel Mañas, autor entre otras de la novela “Historias del Kronen” y “Caso Karen”, pero lo cierto es que hasta este momento han sabido guardar el secreto como si de banqueros suizos se tratara. Y yo les pregunto, ¿Quien creen ustedes que es el autor de “Me cago en mis viejos”?

http://www.netoraton.es/?p=2916

lunes, 20 de julio de 2009

Amarre y Extremos


"Tu nombre es como un ugüento derramado."
-Cantar de los cantares

Escribí en el papel de cartucho tu nombre y tus apellidos
lo enrollé y lo amarré con pelos de mis pubis
luego lo molí y lo mezclé con miles y sudores
no olvidé el buche de café que dejaste en la taza
debí haber agregado un poco de tu semen
de esas gotas que aparecen al otro día
en mis nalgas o en mis encías
Unté de toda esa crema a mis pezones y a mi clítoris
hice un pase de magia y recé toda la vida
Pero tú no has vuelto
y menos
tú en mí no te has derramado.

-Zoé Valdes

Vagón para fumadores (Lumen, 1996)

miércoles, 1 de julio de 2009

troncos sobre casa de mi tío


¿Qué pasa? Olas masivas de ejecutados en Michoacán, Chihuahua, Sinaloa, Baja California, Sonora, Chiapas, Matamoros, Etc. Apenas hoy fueron 40 acribillados en toda la república, principalmente agentes federales.
Si usted viaja por las carreteras de estos ilustres estados mexicanos es muy probable que se tope con un convoy de personas asesinadas. Descuartizadas. Sin cabeza.
Es preferible encontrar personas cuya vida fue arrebatada con violencia que a sus verdugos, los cuales seguramente serán encontrados después en pozoleras, rancherías inhóspitas, encajuelados o por la PGR en restaurantes de lujo.
México es uno de los países sin guerra civil donde más muertes por arma de fuego hay, solamente por debajo de USA. El año pasado fueron 1600 muertos tan solo en Ciudad Juárez. Cifras no autorizadas revelan que en lo que va del 2009 esta cantidad ha sido alcanzada.
El gobierno dice que hay una guerra contra el narco pero el verdadero exterminio se está dando entre las bandas que se disputan las plazas. 13 muertos por acá. 20 por allá. La familia michoacana, el cartel del Golfo, el de Juárez, el de Sinaloa, los paramilitares narcos en la sierra guerrerense, el cartel de Tijuana y un sinfín de organizaciones cuyo proceder es cada vez más agresivo, fatal.
Las sierras y desiertos de México se han convertido en lapidas multitudinarias. El ejercicio del narco es una aspiración cultural en ciertas zonas del país, principalmente el norte. Niños de 10 años sueñan con ser el sicario más efectivo mientras su tío o padre hierven junto a otros cuerpos en alguna siniestra cacerola o son los que cocinan el caldo.
Ayer fue el colmo. Caminando por la ciudad bolañesca de Caborca, Sonora, una lluvia de cuerpos acéfalos cayó sobre la casa de mi tío Fausto. Se dice que los dejaron caer de una avioneta. Más adelante encontraron las cabezas. Por más alejado de la realidad que parezca nos están lloviendo los muertos.
Aquí las principales organizaciones del narco en México (http://www.explorandomexico.com.mx/about-mexico/9/170/):

Principales Cárteles y Grupos de Narcotráfico en México

La cantidad de cárteles que se disputan el control del narcotráfico en México varía según las fuentes. La Procuraduría General de la República (PGR) estima que el narcotráfico está en manos de dos grandes grupos, dirigidos por Joaquín Guzmán y Osiel Cárdenas y la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) declara que hay 30 grandes organizaciones criminales mexicanas a cargo del tráfico de droga. La Sub-Procuraduría de Investigación Especializada contra la Delincuencia Organizada de México (SIEDO) calcula que existen más de 130 células de delincuencia organizada. La Procuraduría General de la República (PGR) numera siete cárteles operando dentro del territorio mexicano: el cártel de Juárez (Carrillo Fuentes), el cártel del Golfo (Osiel Cárdenas), el cártel de Tijuana (Arellano Félix), el cártel de Colima (Amézcua Contreras), el cártel de Sinaloa (Palma-Guzmán Loera), el cártel Milenio (Valencia) y el cártel de Oaxaca (Díaz Parada). México es país que provee mayores cantidades de drogas a Estados Unidos. El mercado de las drogas ha cambiado, antes sólo dedicado al tráfico de mariguana, cocaína y opio, ahora se ha diversificado a la producción y distribución de estupefacientes sintéticos. Estos cambios en el mercado y el deseo de dominar más territorios es lo que ha desatado esta desbocada ola de violencia. En el transcurso de su administración, el Presidente de México Felipe Calderón lanzó un operativo masivo en contra del narcotráfico a través de la capacitación y despliegue de más de 30,000 elementos del Ejército y de la Policía Federal. En reacción a esta maniobra del gobierno, los cárteles han desatado una violencia inusitada, matando a cientos de policías, sicarios rivales y soldados. El presidente Felipe Calderón explicó que la violencia que vive el país es causada por una recomposición de los carteles de la droga tras los golpes que se han dado a sus estructuras. El Presidente Calderón ha hecho de los procesos de extradición una de las armas principales para combatir a la delincuencia organizada, y en año y medio envió a Estados Unidos a 120 delincuentes con apoyo de ese mecanismo. México tiene firmados 24 tratados de extradición a nivel mundial, pero es con el gobierno de Estados Unidos con el que se efectúa 90 por ciento del trabajo en esa materia. La violencia del crimen organizado se ha expandido de manera desenfrenada durante los últimos meses. Edgar Guzmán, de 22 años de edad e hijo del “Chapo”, líder del poderoso Cártel de Sinaloa, fue asesinado el 10 de Mayo del 2008 en el estacionamiento de un centro comercial de su natal Culiacán, sus asesinos dispararon más de 500 balas. Más de 1,100 personas han muerto en crímenes relacionados al narcotráfico de enero a mayo del 2008; más de 2,500 personas murieron en este tipo de hechos durante todo el 2007. Aun tras las rejas, los narcotraficantes continúan manipulando sus cárteles, impartiendo órdenes para eliminar rivales y dejando en evidencia la falta de capacidad del Estado para desarticular al crimen organizado. Uno de los casos más notorios de la impunidad que gozan quienes ya están detenidos sucedió en enero de 2001, cuando Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”, jefe del cártel de Sinaloa y uno de los narcotraficantes más importantes de México, se fugó de la prisión de máxima seguridad. Es tal la corrupción entre algunos funcionarios, que los cabecillas de las redes del narcotráfico tienen libertad de acción dentro de los penales.
El Cártel del Golfo
Banda criminal mexicana iniciada por Juan Nepomuceno Guerra en la década de 1940. A través de los años ha crecido y se ha posicionado a través de estrechos vínculos con políticos, en especial de Tamaulipas, y jefes de la policía. Juan García Abrego fue su líder hasta 1996, cuando se desató una lucha por el poder, tras lo cual quedó a cargo Osiel Cárdenas Guillén, quien fue detenido y puesto en el penal de máxima seguridad Almoyola en marzo de 2003 pero desde allí continuó con el liderazgo del Cártel del Golfo hasta enero del 2007, cuando fue extraditado a Estados Unidos. El 29 de abril del 2008, Carlos Landín Martínez fue sentenciado a cadena perpetua en una corte estadounidense tras ser capturado en McAllen Texas, declarado culpable de coordinar las operaciones del Cártel del Golfo en Tamaulipas; era el responsable de cobrar cuotas por el tráfico de drogas a través de la frontera de Reynosa e imponer castigos, incluyendo tortura y ejecución, a quienes perdían cargamentos o dinero o se negaban a pagar las cuotas. Landín fungía como comandante de la policía judicial de Tamaulipas. Tiene como particularidad que cuenta con el más peligroso grupo de sicarios en la actualidad, conocido como "Los Zetas", quienes actúan en forma de comando para realizar ajustes de cuentas y controlar zonas de influencia y está compuesto por desertores de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano. El grupo de Los Zetas surgió a finales de los años 90, cuando militares de elite desertaron y fueron reclutados para operar como un ejército privado al servicio del cártel del Golfo, dirigido por Osiel Cárdenas, actualmente en prisión. Está formado por un grupo de militares que desertaron del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE) y del Grupo Anfibio de Fuerzas Especiales (GANFE) del Ejército Mexicano. Estos grupos militares fueron formados por el Gobierno de México Estas fuerzas especiales fueron entrenadas para localizar y aprehender a narcotraficantes. Su entrenamiento de elite corrió a cargo de la Escuela de las Américas en Estados Unidos; especializados en táctica, plan de misiones, asaltos aéreos y métodos sofisticados de comunicación. El nombre de Los Zetas proviene de el código utilizado para referirse a oficiales de alto rango en las radio comunicaciones de la Policía Federal Preventiva. Inicialmente al servicio del Cártel del Golfo para capturar a los miembros de cárteles rivales y proteger las rutas para el transporte de drogas, se cree que a partir del arresto de Osiel Cárdenas, manejan sus propias redes de narcotráfico con base en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Cártel de Tijuana
También conocido como el Cártel Arellano Félix, esta es una organización criminal mexicana establecida en Tijuana, Baja California. El Cártel de Tijuana es considerado uno de los más grandes y violentos operando actualmente en México. Este cártel inició cuando el líder del Cártel de Guadalajara, Miguel Ángel Féxlic Gallardo, fue capturado en 1989 y se fragmentó en dos cárteles distintos. El Cártel de Sinaloa a cargo de Joaquín Guzmán Loera alias “El Chapo” y el Cártel de Tijuana liderado por Ramón Arellano Félix. Ramón fue asesinado en un enfrentamiento armado con la policía ministerial de Mazatlán en febrero del 2002, se presume que arribó a esa ciudad para asesinar a “El Mayo Zambada”, líder del Cártel de Sinaloa. Tras su muerte, el mando del Cártel de Tijuana quedó en manos de sus hermanos, tres de ellos ya han sido capturados. Con el fin de aumentar su capacidad de producción y distribución de narcóticos, el Cártel de Tijuana ha establecido una relación de cooperación y colaboración con el Cártel del Golfo, aunque continúan funcionando como organizaciones criminales independientes. En agosto del 2006, Francisco Javier Arellano Félix fue capturado por la Guardia Costera de Estados Unidos mientras practicaba pesca recreativa. Fue declarado culpable y sentenciado a cadena perpetua por una corte de California. El 26 de abril del 2008 ocurrió uno de los eventos más sangrientos de este cártel, cuando narcotraficantes se enfrentaron en una balacera por las calles de Tijuana, 13 personas murieron. En enero de este mismo año, ocho personas murieron durante una confrontación en una casa de seguridad donde el Cártel de Tijuana tenía varios rivales secuestrados, sicarios dentro de la casa dispararon durante tres horas contra los policías y soldados que intentaban capturarlos.
El Cartel de Juárez
El Cártel de Juárez es la organización con mayor presencia en México. Mantiene su área de influencia en 21 entidades. El Cártel de Juárez comenzó bajo el mando de Amado Carrillo Fuentes, apodado “El Señor de los Cielos” por su innovador sistema para transportar cocaína, una flota completa de aviones Boeing 727. Murió en 1997 durante una cirugía plástica que se realizaba con el fin de no ser identificado por las autoridades. Carrillo Fuentes fue el traficante más poderoso de su época y llegó a poseer 25,000 millones de dólares. Se sabe que bajo su autoridad, el Cártel de Juárez ganaba 200 millones de dólares cada semana, el 10% de este monto era entregado a las autoridades en soborno. Uno de sus principales operadores era el general Jesús Gutierrez Rebollo, nombrado por México y apoyado por Estados Unidos como el máximo líder de la lucha contra el narcotráfico en México; pocos meses después de este nombramiento fue descubierta su complicidad con el cártel.
Cártel de Sinaloa
El cartel de Sinaloa, dirigido por Joaquín Guzmán Loera, alias "El Chapo", mantiene su área de influencia en 17 estados. También es conocido como la organización Guzmán Loera o el Cártel del Pacífico. Está involucrado principalmente en el tráfico y distribución de cocaína colombiana, mariguana mexicana y heroína asiática. Esta organización comenzó en la década de 1990 y opera en la región del Pacífico Norte y desde la audaz fuga de “El Chapo” del penal de máxima seguridad en Puente Grande en enero del 2001, ha ampliado su marco de acción hacia las zonas centro y sur del país, confrontándose con los grupos delictivos que tenían éstas como su área natural de influencia. Sus sanguinarios enfrentamientos con los principales jefes de los carteles de Arellano Félix y la familia Carrillo Fuentes han dejado una estela de sangre por todo el país, ligado a hechos judiciales de gran trascendencia en México, como el homicidio del cardenal Juan Jesús Posadas, la ejecución de Rodolfo Carrillo Fuentes y el asesinato del coordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal, el líder de los operativos contra esos grupos delictivos, Edgar Eusebio Millán Gómez ; este último ejecutado en mayo del 2008 en venganza por los decomisos de droga y detención de 13 de sus sicarios. El día 27 de mayo del 2008, el Cártel de Sinaloa asesinó a siete agentes de la policía Federal de México en un enfrentamiento mientras los agentes hacían efectiva una orden de cateo en una vivienda de seguridad del cártel. Esto fue respondido por la Secretaría de Seguridad Pública al reforzar su presencia con 200 agentes más, aumentar el calibre de armas que utilizan los policías y el nivel de blindaje de sus patrullas.
Cártel de Colima
El Cártel de Colima, de los hermanos Amezcua Contreras, mantiene su área de influencia en 7 estados de México. Es considerado una de las mayores organizaciones dedicadas a la producción y distribución de drogas sintéticas, se les refiere como los “Reyes de las Metanfetaminas”. Se creó en 1988, originalmente sólo operaba traficando para los cárteles de Colombia, pero pronto se convirtió en una importante organización criminal para el tráfico y procesamiento internacional de anfetaminas. El capo Luis Ignacio Amezcua Contreras fue detenido en Guadalajara, Jalisco, el 1 de junio de 1998 y recluido en el penal de máxima seguridad “Almoloya” y sentenciado a 49 años de prisión. A pesar de esto, el Cártel de Colima continúa operando en los estados de Baja California, Nuevo León, Aguascalientes, Jalisco, Colima, Michoacán y Distrito Federal. En el año 2005, las autoridades detuvieron a 1,785 colaboradores de este cártel.
Cártel Milenio
Este cártel también es conocido como “Los Valencia” y es dirigido por Luis Valencia Valencia, en sustitución de Armando Valencia Cornelio, quien fue detenido por las autoridades en agosto de 2003. Es un grupo que se separó del Cártel de Juárez en 1999. Tiene presencia en seis estados: Michoacán, Colima, Jalisco, Distrito Federal, Nuevo León y Tamaulipas; su base de operaciones está en Michoacán, donde se produce marihuana y amapola.
Cártel de Oaxaca
Fue comandado por Pedro Díaz Parada “El Cacique de Oaxaca”, quien fue detenido en enero del 2007. Su área de influencia es sobre siete estados del país: Chihuahua, Durango, Tamaulipas, Veracruz, Chiapas y Oaxaca. Esta organización criminal trafica con marihuana y cocaína, principalmente. Se le considera la más importante productora de marihuana en la zona del Istmo. Pedro Díaz Parada se inició en el mundo del narcotráfico sembrando marihuana en San Pedro Totolapa, Oaxaca, en los años 70. Extendió su actividad hacia el tráfico de cocaína utilizando lanchas rápidas y avionetas. Fue detenido y sentenciado en 1985 a 33 años de prisión. Al momento de escuchar su sentencia de voz del juez Villafuerte Gallegos, Díaz Parada le dijo “yo me iré y tú morirás”. Fue recluido en el penal de Santa María Ixcotel, Oaxaca, de donde se fugó días después. En septiembre de 1987 el juez Villafuerte Gallegos fue ejecutado cerca de su domicilio particular, en Cuernavaca, lugar donde fue cambiado para protegerlo de las amenazas de Díaz Parada.

Artículo Producido por el Equipo Editorial Explorando México.Copyright Explorando México.

Putas de Garibaldi matan a La Parkita y el Espectrito junior


Conocidas como “las goteras”, un grupo de putas de la zona de Garibaldi en la colonia Cuauhtémoc de la Ciudad de México, asesinaron a las miniestrellas de la triple A, la Parkita y el Espectrito. (Fuente: diario “La razón”): “Una de las líneas de investigación de la PGJDF apunta a que los luchadores podrían haber sido víctimas de una intoxicación causada por gotas oftalmológicas y algún medicamento similar, mezclado con bebidas alcohólicas que ingirieron.
Esta mecánica era la aplicada por una banda conocida como Las Goteras, integrada principalmente por sexoservidoras, quienes "dormían" a sus clientes mezclando gotas en sus bebidas, y una vez dormidos les robaban sus pertenencias. El año pasado, casi 20 presuntos integrantes de este grupo delictivo fueron detenidos por agentes judiciales, y quienes actualmente se encuentran bajo proceso penal, pero no se descarta que células de la misma banda o imitadores podrían seguir operando”.
Se descarta que estos enanos colosos hayan sido víctimas de “Las durmientes”, putas (y putos) pertenecientes al barrio citadino de la Merced, ya que su mecánica consiste en dormir a sus clientes aplicando algún tipo de BENZODIACEPINAS en zonas rectales, inmovilizando así a las víctimas. Una línea de investigación, más lejana pero no menos probable en este país, señala que las mujeres con apariencia de suripantas que los enanos llevaban al hotel de paso eran en realidad zombis fabricados por el Doctor Miró, cuyo plan perverso gravita en deshacerse de todos los luchadores enmascarados. Empezando por los gladiadores diminutos.

lunes, 15 de junio de 2009

Michael J


De pequeño quería deslizarme como un negrito que salía en la tele con chamarra roja. Un negrito que, con ojos de lumbre, peleaba contra zombis retándolos con los pasos de baile más alucinantes. Después ese negrito se deslizaba dentro de pequeños que, como yo, admiraban:

1- Su rostro de porcelana estilo fantasma de la ópera

2- Sus pasos extravagantes de baile (Ya sin ojos de lumbre ni la piel morena, ni chaquetas rojas ochenteras).

3- Sus pegajosas rolitas de ciencia ficción y paz.
4- Su enorme fortuna.
Pues bien, hoy murió ese negrito de piel blanca. Ya llevaba años zombi y en lugar de cerebros chupaba, bueno, ustedes ya saben lo que chupaba.

Como cambian las cosas. Ya ni la nostalgia permanece del mismo color.

viernes, 29 de mayo de 2009

And death i think is no parenthesis


since feeling is first

who pays any attention

to the syntax of things

will never wholly kiss you;


wholly to be a fool

while Spring is in the world


my blood approves,

and kisses are a better fate

than wisdom

lady i swear by all flowers. Don't cry

- the best gesture of my brain is less than

your eyelids' flutter which says


we are for each other; then

laugh, leaning back in my arms

for life's not a paragraph


And death i think is no parenthesis


-E.E. Cummings

miércoles, 27 de mayo de 2009

La hora del fantasma


Él no atraviesa paredes, las hace. No habita túneles sobrios, los hace. Andrés Iniesta es un arquitecto de las canchas. Un fantasma que es el engranaje, el revulsivo del equipo más asombroso de la última década. Iniesta no asusta, deleita. ¡Barça campeón de la champions 2009! Ni Messi ni Ronaldo. Es la hora del fantasma.

lunes, 25 de mayo de 2009

Tres cronopios inéditos creados por Julio Cortázar.


Vialidad
Un pobre cronopio va en su automóvil y al llegar a una esquina le fallan los frenos y choca contra otro auto. Un vigilante se acerca terriblemente y saca una libreta con tapas azules.
-¿No sabe manejar, usted? -grita el vigilante.
El cronopio lo mira un momento, y luego pregunta:
-¿Usted quién es?
El vigilante se queda duro, echa una ojeada a su uniforme como para convencerse de que no hay error.
-¿Cómo que quién soy? ¿No ve quién soy?
-Yo veo un uniforme de vigilante -explica el cronopio muy afligido-. Usted está dentro del uniforme pero el uniforme no me dice quién es usted.
El vigilante levanta la mano para pegarle, pero en la mano tiene la libreta y en la otra mano el lápiz, de manera que no le pega y se va adelante a copiar el número de la chapa. El cronopio está muy afligido y quisiera no haber chocado, porque ahora le seguirán haciendo preguntas y él no podrá contestarlas ya que no sabe quién se las hace y entre desconocidos uno no puede entenderse. (1952)

Almuerzos
En el restaurante de los cronopios pasan estas cosas, a saber que un fama pide con gran concentración un bife con papas fritas, y se queda deunapieza cuando el cronopio camarero le pregunta cuántas papas fritas quiere.
-¿Cómo cuántas? -vocifera el fama-. ¡Usted me trae papas fritas y se acabó, qué joder!
-Es que aquí las servimos de a siete, treinta y dos, o noventa y ocho -explica el cronopio.
El fama medita un momento, y el resultado de su meditación consiste en decirle al cronopio:
-Vea, mi amigo, váyase al carajo.
Para inmensa sorpresa del fama, el cronopio obedece instantáneamente, es decir que desaparece como si se lo hubiera bebido el viento. Por supuesto el fama no llegará a saber jamás dónde queda el tal carajo, y el cronopio probablemente tampoco, pero en todo caso el almuerzo dista de ser un éxito. (1952-1956)


'Never stop the press'
Un fama trabajaba tanto en el ramo de la yerba mate que-no-le-quedaba-tiempo-
para-nada. Así este fama languidecía por momentos, y alzando-los-ojos-al-cielo exclamaba con frecuencia: "¡Cuán sufro! ¡Soy la víctima del trabajo, y aunque ejemplo de laboriosidad, mi-vida-es-un-martirio!".
Enterado de su congoja, una esperanza que trabajaba de mecanógrafo en el despacho del fama se permitió dirigirse al fama, diciéndole así:
-Buenas salenas fama fama. Si usted incomunicado causa trabajo, yo solución bolsillo izquierdo saco ahora mismo.
El fama, con la amabilidad característica de su raza, frunció las cejas y estiró la mano. ¡Oh milagro! Entre sus dedos quedó enredado el mundo y el fama ya no tuvo motivos para quejarse de su suerte. Todas las mañanas venía la esperanza con una nueva ración de milagro y el fama, instalado en su sillón, recibía una declaración de guerra, y/o una declaración de paz, un buen crimen, una vista escogida del Tirol y/o de Bariloche y/o de Porto Alegre, una novedad en motores, un discurso, una foto de una actriz y/o de un actor, etc. Todo lo cual le costaba diez guitas, que no es mucha plata para comprarse el mundo.
(c 1955)

martes, 21 de abril de 2009

Se murió el autor de noches de cocaína


El escritor británico J. G. Ballard, autor de «El Imperio del Sol» -novela en la que describe su lucha para sobrevivir en un campamento de prisioneros japonés en China cuando era niño-, falleció a los 78 años, a consecuencia de «una larga enfermedad». Ballard pasará a la historia universal de la literatura como un escritor visionario, autor de fábulas apocalípticas que le elevarían a la categoría de «autor de culto» para los aficionados a la ciencia ficción, con títulos como «La exhibición de atrocidades» o, más reciente, «Bienvenidos a Metro-Center». Su primera novela, «The drowned world», publicada en 1962, trata del derrumbamiento psicológico de un grupo de científicos en un Londres inundado por la fusión de los casquetes de hielo polares. Nacido en Shanghai, Ballard estudió en la Universidad de Cambridge antes de convertirse en piloto de la Royal Air Force británica y trabajar sucesivamente en una agencia de publicidad, como vendedor de enciclopedias y director adjunto de la publicación científica «Chemistry and Industry». Varias novelas de Ballard, la popular «El Imperio del Sol», «Crash» y «La exhibición de atrocidades» fueron adaptadas cinematográficamente por Spielberg, Cronenberg y Weiss.

viernes, 13 de marzo de 2009

Café Perec


Café Perec ¿Qué sucede cuando la gente no tiene el mismo sentido del humor? No reaccionan adecuadamente entre sí. Es lo que acaba de ocurrirme con el camarero de este Café Tabac de la plaza de Saint-Sulpice, café Perec para algunos. Decía Wittgenstein que, cuando la gente no comparte el mismo humor, es como si entre ciertos individuos existiese la costumbre de que una persona arrojara un balón a otra, y se estableciera que la otra persona tenía que atraparlo y devolverlo, y que algunas, en lugar de devolverlo, se lo metieran en el bolsillo. Decido olvidarme del camarero de humor distinto y miro hacia la iglesia de Saint-Sulpice. Estoy en el mismo lugar de observación desde el que Georges Perec, en los años setenta, se dedicaba a catalogar esta plaza y anotar de ella muy especialmente "lo que generalmente no se anota, lo que se nota, lo que no tiene importancia, lo que pasa cuando no pasa nada, salvo tiempo, gente, autos y nubes". Aquí escribió Tentativa de agotar un lugar parisino, un libro que consistía en una meticulosa larga lista de lo que había visto en la plaza a lo largo de varios días diferentes. En su momento lo leí con infinita diversión. Allí había anotado Perec todo lo que pasaba cuando no pasaba nada y había excluido de su lista sólo lo que pudiera resultar demasiado trascendente, y sobre todo lo que ya estaba "suficientemente catalogado, inventariado, fotografiado, contado o enumerado”. Apuro mi café y tengo un recuerdo para El salto en paracaídas, un breve texto genial, incluido en Nací. Cuando aún era un tierno principiante, hacia 1959, al final de una reunión del grupo de la revista Arguments, Perec pidió la palabra, y su intervención tuvo alguien la ocurrencia de grabarla. Feliz ocurrencia. Perec contó de forma tan inspirada como tartamuda una experiencia muy personal (“la cuento porque estoy un poco... porque he bebido un poco”), una aventura de su breve paso por el paracaidismo y la historia de cómo llegó a comprender que, en la literatura y en la vida, era absolutamente necesario lanzarse, tirarse al vacío, “para persuadirse de que eso podría quizá tener un sentido que incluso uno mismo ignorase”. Entre los libros de primera hora que me cambiaron la vida, estuvieron siempre los de Perec, libros que recuerdo haber leído fascinado, devolviéndole al autor, página a página, cada uno de los eufóricos balones que lanzaba. Desde el primer momento, vi que Perec era inseparable de Roussel y de Kafka, precisamente los otros dos escritores que entonces más me interesaban, pues me habían demostrado que en novela era posible hacer cosas muy distintas de las que se predicaban en mi tierra. En aquellos días, por lo que fuera, todo a veces se producía de la forma más sencilla. Y así Kafka, Roussel y Perec llegaron a mí con la máxima naturalidad, casi juntos, y después lo hicieron libros también decisivos como el ensayo novelado Maupassant y “el otro”, donde Alberto Savinio, con el pretexto de hablar de Maupassant, acababa hablando de todo, y para eso le bastaba con asociar cualquier idea con el dichoso tema central, en realidad ausente. O libros como El mito trágico del “Ángelus” de Millet, de Salvador Dalí, cuyo atractivo método de trabajo, alejado de todos los dogmas sobre la novela, se basaba también en asociaciones de ideas, asociaciones que se desplegaban en un tapiz que, al dispararse en todas los itinerarios posibles, acababa por convertirse en inagotable. Pasa un autobús de la línea 63, y lo anoto -como todo- meticulosamente. Pasa luego uno de la línea 96, que va a Montparnasse. Frío seco, cielo gris. Pasa una mujer elegante llevando tallos en alto, un gran ramo de flores. El 96 es el mismo autobús que Perec atrapara en sus apuntes, y el mismo que luego me trasladará a mi hotel aquí en París, el Littré. Un rayo de sol. Viento. Un mehari verde. Lejano vuelo de palomas. Instantes de vacío. Ningún coche. Después cinco. Después uno. “La trama es una vulgaridad burguesa”. Le adjudico la frase a Nabokov. “El estilo avanza dando triunfales zancadas, la trama camina detrás arrastrando los pies”, recuerdo que respondió John Banville en una entrevista. Es posible que estas dos citas sean como lanzar un balón que no van a devolvernos nunca todos aquellos que tienen todavía el humor de situar a la trama decimonónica en un pedestal absoluto. La novela del futuro verá esa trama como una simpleza que hizo furor en cierta época y se reirá de un tópico que me machacó durante mi primera juventud, esa idea de que la novela -“como bien saben en el mundo anglosajón”- ha de privilegiar siempre la trama. Hoy me alegro de haber visto pronto que aquella idea británica sobre la novela, como sucedía con tantas otras, no tenía porque considerarla una regla inamovible. Me moría de risa el día en que le escuché a Kart Vonnegut decir que las tramas en realidad eran sólo unas cuantas y no era necesario darles demasiada importancia, bastaba con incorporar –casi al azar- una cualquiera de ellas al libro que estuviéramos escribiendo y de esta forma disponer de más tiempo para la forja de lo que realmente habría de importarnos: el estilo. ¿Y cuáles eran esas tramas? Vonnegut se las sabía de memoria, tenía una lista muy perecquiana: “Alguien se mete en un lío y luego se sale de él; alguien pierde algo y lo recupera; alguien es víctima de una injusticia y se venga; el caso conmovedor de Cenicienta; alguien empieza a ir cuesta abajo y así continúa; dos se enamoran, y mucha otra gente se entromete; una persona virtuosa es acusada falsamente de haber pecado o de haber cometido un crimen; una persona se enfrenta a un desafío con valentía, y tiene éxito o fracasa; alguien inicia una investigación para conocer la verdad de un asunto...”. ¿Y qué sucede cuando no ocurre nada? Que termina uno a veces por acordarse de los orígenes de su fascinación por las tramas no convencionales y recuerda cuando descubrió que se podían construir libros libres, de estructuras inéditas, con asociaciones y cavilaciones en torno a centros ausentes... Son las doce y doce de la mañana. Pasa un camión Printemps Brumell. Viento. Pienso en métodos construidos con hiperasociaciones de ideas que -como en libros de Savinio o Dalí- no agotan nunca el tema en estudio y observación. Sin duda, una obra maestra absoluta de ese nuevo género fue la hipernovela La vida instrucciones de uso, donde se daban cita todas las tramas de Vonnegut, que de paso eran dinamitadas, en una operación parecida a la de Flaubert cuando en Madame Bovary acabó con el realismo a base de llevarlo hasta su extremo máximo y ser el más realista de todos. Pienso en los veintinueve años y once meses que se cumplen desde que apareciera La vida instrucciones de uso, un libro al que Italo Calvino, por variadas razones -“el compendio de una serie de saberes que dan forma a una imagen del mundo, el sentido del hoy que está también hecho de acumulación del pasado y de vértigo del vacío”- consideraba como el último verdadero acontecimiento en la historia de la novela: puzzle en el que el propio puzzle da al libro el tema de la trama y el modelo formal, y donde el proyecto estructural y la poesía más alta conviven con asombrosa naturalidad. De hecho, durante un largo tiempo La vida instrucciones de uso fue para muchos, en efecto, el último verdadero acontecimiento de la novela moderna. Después, vendría un gran libro de Roberto Bolaño, Los detectives salvajes, que recogía con extraordinaria osadía y talento el guante lanzado por Perec. Día de cielo gris, frío seco. Viento. Pasa un señor con aspecto de secretario “provisionalmente definitivo” de alguna sociedad secreta de inventores de aforismos. Parece salido de una de las páginas más divertidas de Pensar / Clasificar. Podría llamarse perfectamente Bénabou. Pasa otro autobús de la línea 63. Pasa el 96. Lasitud de los ojos. Risas sofocadas. Distintos humores. Voy anotando. Alguien mueve un visillo. Tañidos de la campana de Saint-Sulpice. Se acumula el pasado y al mismo tiempo el vértigo de un vacío, lo que también anoto debidamente.
--> Enrique Vila-Matas